Forma parte de una tradición milenaria y ayuda a conservar el patrimonio natural de nuestro pueblo.
Apadrinar un olivo no es solo un gesto simbólico: es una forma real de contribuir a la preservación del medio rural, apoyar a pequeños productores y conectar con la tierra. Al apadrinar uno de nuestros olivos centenarios, estarás ayudando a mantener vivo un cultivo que forma parte de nuestra historia, nuestras raíces y nuestra cultura.
¿Quieres unirte a esta experiencia? Ponte en contacto con nosotros.